Los nuestros sabían que resistir iba a ser fundamental y que tenían que luchar mucho. Tenían que hacerlo lo mejor posible y aguantar hasta el pitido final.
En el banco no había muchas opciones.
Volvimos a ver una vez más un espectáculo bajo palos. Los cinco cancerberos tuvieron que sacar y demostrar constantemente su arte ,sus guantes , sus botas para evitar el peligro, realizando impresionantes despejes y espectaculares paradas. Lander esta vez se fundó la elástica azul y no lo hizo nada, nada mal. El el cancerbero local frustró en más de una ocasión los planes de Amaya.. y viceversa.
También vimos en el campo una bonita lucha tribal. Acompasada, rápida y atractiva danza alrededor del balón por parte de ambos contrincantes.
En la grada los cuartos se nos han hecho eternos pese a pasar rápidos e intensos en el campo. Nervios a flor de piel y corazones al borde del infarto.
Como siempre ocupaban un lugar en ellas los abuelos incondicionales de los rojos.
En el primer cuarto Amaya lograba adelantarse gracias a los goles de Iker y Francesco .Los rojos lograban ser algo superiores y poseían la mayor parte del cuarto el balón, aunque no lograban estar del todo cómodos por la presión de un Pamplona que no estaba conforme con el resultado. Aún perdonamos unos cuantos lanzando el balón al larguero ,los postes o directos a la mano del portero.
Ya en el último cuarto del encuentro y tras estampar uno de los verdes directamente el esférico en el estómago de Unax, el Pamplona lograba empatar el partido en el último segundo del mismo con un gol tonto ,muy tonto .
Ambos equipos han merecido ganar se han dejado la piel y han luchado hasta el final, claro es que perder no merecía ni el Pamplona ni el Amaya.
Así que justo resultado!!!! Justo empate!!!
No nos olvidamos de la familia Eslava y le seguimos mandando todo nuestro ánimo desde aquí.
A.L.E.
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